Algunas enfermedades son silenciosas y acaban diagnosticándose sólo cuando están muy avanzadas o durante una revisión. Es el caso de tumor de bazo en perros Aunque puede afectar a mascotas de cualquier edad, es más frecuente en animales de más de seis años. Infórmese sobre los posibles tratamientos.

Desarrollo

La evolución de una neoplasia en el bazo del perro Sin embargo, en la mayoría de los casos el diagnóstico se hace tarde. Esto ocurre porque, al principio, el animal no suele presentar signos clínicos.

La enfermedad ya está presente, pero, aparentemente, el peludo está bien. Como no tiene síntoma, el tutor no lo lleva a la consulta, y el tumor en el bazo en perros se va desarrollando, sin que se haga nada. Así, cuando aparecen los primeros signos clínicos, la neoplasia ya es grande, lo que limita mucho las opciones de tratamiento.

Por ello, es de suma importancia que la mascota pase una revisión anual o, en el caso de los perros senior, cada seis meses. De este modo, enfermedades como ésta podrían diagnosticarse al principio, con mayores posibilidades de curación.

Signos clínicos

En general, cuando el tumor de bazo en perros aumenta de tamaño y empieza a dar señales, las primeras quejas del tutor son que el animal no quiere andar, ha dejado de comer o está muy callado.

Además, es probable que la persona note un mayor volumen del abdomen, como consecuencia de un aumento del tamaño del bazo. También es posible identificar:

• Pérdida de apetito;
• Vómitos;
• Letargo;
• Fiebre;
• Pérdida de peso;
• Anemia;
• Diarrea;
• Aumento del número de veces que el animal orina;
• Deshidratación,
• Taquicardia.

Todavía hay casos en que el tumor en el bazo en perros si rompe. Entonces, es necesario correr para el médico-veterinario, porque el cuadro empeora en pocos minutos. Cuando esto sucede, la dificultad para respirar y la encía pálida son los principales signos clínicos que pueden ser vistos por el tutor.

Diagnóstico

En los casos en que el animal ya presente signos clínicos y sea llevado al médico veterinario, probablemente el profesional solicitará más exámenes, entre ellos:

• Radiografías;
• Análisis de sangre,
• Ultrasonografía.

Sin embargo, es importante saber que el tumor de bazo en perros puede diagnosticarse antes de que aparezcan los síntomas. Para ello, es necesario que el tutor programe una consulta, y el peludo realice un chequeo. La existencia de alteración en el bazo puede detectarse en la ecografía.

Tratamiento

Tanto si la neoplasia es benigna como maligna, el tratamiento que se suele adoptar es quirúrgico. El nombre de la cirugía de la esplenomegalia consiste en extirpación bazo perro Este procedimiento suele ser eficaz cuando la enfermedad está en sus inicios o el tumor es benigno.

También puede adoptarse cuando un pequeño nódulo en bazo de perro Sin embargo, en los casos en que el tumor del bazo es maligno y ya de gran tamaño, es posible que el cáncer se haya extendido a otros órganos.

Por lo tanto, el tratamiento de los tumores de bazo en perros Una alternativa es la administración de quimioterapia para inducir la reducción del tumor.

Todos estos procedimientos ayudarán a prolongar la vida del peludo, pero cada uno de ellos tiene pros y contras, que serán explicados por el médico a los tutores.

Del mismo modo que la ecografía puede ser útil para el diagnóstico de tumores de bazo, se utiliza para detectar otras enfermedades. Vea cómo funciona